Ir a un restaurante a probar nuevos sabores, texturas y productos, es algo muy usual entre los amantes de la gastronomía. Podríamos decir que los chefs son artistas, y los platos los lienzos. Cocinar es un arte que Jon Favreau ha sabido tratar en esta película. Carl (Favreau), es un cocinero que tras abandonar el restaurante en el que trabajaba, monta un negocio de comida ambulante, junto a su hijo (Emjay Anthony) y su mejor amigo (Jon Leguizamo). Esto le unirá a su primogénito, al que desde la separación con su ex-pareja (Sofía Vergara), no había prestado la suficiente atención.
Entrando en materia, Favreau se rodea de un reparto verdaderamente imponente. Actores de mucha categoría como el propio Favreau, Dustin Hoffman, Scarlett Johansson o Robert Downey Jr., dan a la película un gran empaque. Actores de renombre que hacen pequeños papeles dando al público actuaciones al nivel de las expectativas. Sofía Vergara, está en la línea ascendente que ha mantenido siempre, la que la está llevando a colaborar con gente como Turturro o Woody Allen. En general un reparto excelentemente escogido, que da un punto extra a la película.
Como película, es ligera y digerible, algo que últimamente es complicado ver en la industria cinematográfica. Son casi dos horas de película y son muy amenas. Es la típica película para ver en familia y pasar el rato. Esto no quita que haya cosas muy buenas como la elección musical, que resulta un acierto total. También tenemos que fijarnos en el guión, que es el típico de una comedia, donde los personajes son planos en su mayoría y solo el del protagonista toma forma dependiendo de la etapa de la película en la que se encuentre. El personaje del niño, podría haber estado mejor trabajado, pero en este caso resulta bastante arquetípico.
Resumiendo, 'Chef' es una película agradable y sabrosa que deja un buen sabor de boca. No obstante, sabemos que tipo de película es y debemos de tratarla como tal, sin pretensiones y con la única intención de saborear lo que el Chef Favreau nos ofrece.
Lo mejor: En dos horas no te aburres en absoluto. Es dinámica, lo cual resulta de agradecer en la comedia de hoy en día que, en ocasiones, es tan repetitiva que desespera.
Lo peor: que un reparto tan impecable como este no haya podido lucirse en otro tipo de película.
Valoración: ***
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